Postulación

Concurso IX Concurso del Fondo de Investigación del Bosque Nativo
Nombre Proyecto 004/2018 Esquemas de plantaciones suplementarias de quillay para aumentar los recursos florares e incentivar su uso apícola en el marco de la Ley 20.283
Estado Proyecto seleccionado
Monto Solicitado $44.565.925
Línea de Investigación Línea 2. Proponer y evaluar métodos, tratamientos y acciones para la producción y recolección sustentable de Productos Forestales No adereros (PFNM) de bosques nativos.
Investigador Responsable Gustavo Cruz Madariaga
Institución Patrocinante Universidad de Chile
Resumen Ejecutivo

El Tipo Forestal Esclerófilo tiene una amplia distribución en Chile, abarcando 473.436 ha, concentrándose entre las regiones de Valparaíso y O’Higgins, donde en conjunto representan el 77% de la superficie nacional del tipo. Estos bosques han sufrido un fuerte uso antrópico, lo que ha producido pérdidas de biodiversidad, estabilidad del ecosistema y de potencial productivo. Una alternativa para aumentar la productividad económica de estos bosques, manteniendo al mismo tiempo los equilibrios ecológicos, y promoviendo su recuperación, la constituye el uso apícola de este. El uso apícola es complementario a otros usos del bosque nativo (leña, biomasa industrial, ganadería, frutos, hojas, etc.) y contribuye a su valoración y conservación. Sin embargo, en muchos casos el bosque esclerófilo se encuentra empobrecido en cuanto a la oferta de recursos florares para solventar su uso apícola. Entre las especies del bosque esclerófilo, quillay (Quillaja saponaria Mol.), es uno de los árboles nativos con mayor potencialidad económica de la zona semiárida y mediterránea de Chile central. Tradicionalmente se ha usado como combustible, artesanías, detergente y champú artesanal, uso silvopastoral, ornamental y medicinal. Recientemente está siendo usado para la obtención de saponina, las cuales tienen múltiples usos industriales. Sin embargo, es también una de las especies con mayor potencial apícola de este tipo forestal, debido a su abundancia y oportuna oferta de recursos florares para la alimentación de los apiarios y a las características de la miel que se obtiene de éste.



En virtud de lo anterior, este proyecto tiene por objetivo proponer esquemas silvícolas de plantaciones suplementarias de quillay en bosques esclerófilos con baja presencia de la especie, para aumentar la oferta de recursos florares de uso apícola en el mediano plazo, incentivando el manejo de estos bosques y su uso apícola en el marco de la Ley 20.283.



En este proyecto, se caracterizarán los bosques esclerófilos con presencia de quillay susceptibles de ser manejados mediante plantaciones suplementarias de esta especie. Se cuantificará la producción de miel y polen de árboles quillay y especies arbóreas acompañantes de interés apícola. Se propondrán y establecerán módulos demostrativos con esquemas de manejo con plantaciones suplementarias en bosques esclerófilos susceptibles de ser manejados para la producción apícola. Se determinaran los costos de estas actividades silvícolas y su concordancia y factibilidad de aplicación en relación a lo establecido en la Tabla de valores del Fondo de Conservación Recuperación y Manejo del Bosque Nativo. Además, se proyectará el crecimiento de la plantación suplementaria, así como la oferta de recursos florares de uso apícola en el mediano plazo, teniendo como base información de parcelas permanentes con ensayos de plantación de quillay. Los resultados serán sistematizados en un manual práctico (a nivel de manuscrito) con la aplicación de esquemas de manejo para plantaciones suplementarias en bosques esclerófilos. Para promover el manejo apícola del bosque esclerófilo, se elaborará un manual de uso apícola (a nivel de manuscrito) que considere en su concepción la visión y necesidades de los apicultores, mediante metodologías participativas.



El conocimiento científico-tecnológico generado por el proyecto será difundido por distintos mecanismos al sector productivo, a entidades gubernamentales sectoriales y universidades. Se estima que la adopción de esta alternativa silvícola podría aumentar la oferta de recursos florares, para incentivar el uso apícola y el manejo del bosque esclerófilo en el marco de la Ley Nº 20.283.