Resumen de los resultados obtenidos

Describa en forma precisa y breve el tópico general del proyecto, sus metas y objetivos y los resultados alcanzados, enfatizando como el proyecto es de utilidad para la aplicación de la Ley Sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal. Utilice un lenguaje apropiado para la comprensión del público no especialista en el tema. Esta información será publicada en la página web del Fondo de Investigación del Bosque Nativo
Proholopterus chilensis o “gusanera del roble” es un cerambícido nativo que ataca Nothofagus, principalmente Robles vivos, entre Maule y Los Lagos. El daño lo causan las larvas que taladran la madera, sin matar al árbol, pero mermando la producción y dejándola solo útil para leña o astillas. Por tanto, se requiere desarrollar estrategias de gestión sostenible contra P. chilensis, según nuestra aproximación, estudiando el mecanismo de comunicación química de este xilófago, para caracterizar sus conductas sexuales e identificar feromonas sexuales con las cuales desarrollar tecnologías de manejo, junto a la identificación de prácticas silvícolas útiles para este propósito. Como objetivo general del proyecto (código FIBN 021/2018) se planteó desarrollar una estrategia de manejo sostenible de P. chilensis, mediante la identificación y uso de semioquímicos y técnicas silvícolas en formaciones de roble-raulí-coihue en la Región de La Araucanía.
Respecto del OE1 del proyecto, “Caracterizar morfológica y biológicamente a Proholopterus chilensis, junto a sus daños y factores de predisposición en el tipo forestal Roble-Raulí-Coihue, y potenciales enemigos naturales”, se cuantificó el dimorfismo sexual y se describieron los huevos de la especie. Fenológicamente, este insecto presenta emergencia y actividad de adultos concentrada en diciembre y enero, por alrededor de 6-8 semanas en Maquehue (La Araucanía) y Llifén (Los Ríos), mucho menos que lo planteado en alguna literatura. Respecto del daño, las galerías producidas por las larvas son longitudinales con sección ovalada, iniciándose desde el nivel del suelo y alcanzando un largo de hasta poco más de 3 m. También hay galerías horizontales, algunas coincidentes con los orificios “respiraderos” (para la expulsión del aserrín por parte de la larva) y de emergencia de adultos. El número y volumen de galerías se correlaciona directamente con el diámetro del tronco e inversamente con su altura, en trozas de 3 árboles talados y disectados, de hasta 30 cm de DAP. El volumen comprometido por las galerías representó hasta un 2,5% de esas trozas maderables evaluadas hasta un máximo de 4 metros de altura. Sin embargo, en evaluaciones de campo en parcelas con robles con DAP entre 5 y 55 cm, la intensidad del daño (orificios de emergencia x árboles infestados/parcela) se incrementó hasta alrededor de los 50 cm y luego se reduce en DAP mayores. El peak del porcentaje de árboles dañados/parcela, se presenta en la clase diamétrica 25-34 cm, y luego se reduce. En todos los casos, las trozas afectadas son las de mayor valor comercial.
El porcentaje promedio de robles infestados por P. chilensis en las parcelas evaluadas en región de La Araucanía fue de 29% (con máximo de 59%), mientras que en Llifén fue del 25% (con máximo de 56%). El porcentaje de infestación e intensidad de ataque presentan una correlación negativa con la altitud (m.s.n.m.), cobertura del sotobosque, densidad (número de árboles/ha) del conjunto de especies en el rodal. La mayor intensidad de ataque ocurre en densidades entre los 100-500 N. obliqua/ha.
Respecto del OE2, “Evaluar feromonas genéricas como potenciales atrayentes sexuales de P. chilensis”, del trampeo en campo se obtuvieron 538 ejemplares de Cerambycidae pertenecientes a 11 especies, todas nativas, algunas de las cuales son reconocidos agentes de daño forestal y dos respondieron significativamente a 1-3 de los 8 componentes evaluados, siendo potencialmente útiles para su monitoreo o manejo. Sin embargo, ninguno de los compuestos fue atractivo para P. chilensis, no obstante, se verificó que los ensayos fueron desarrollados en lugares y épocas en las que los adultos de esta especie están presentes y activos. Por lo tanto, P. chilensis usa feromonas constituidas por otros compuestos químicos diferentes a los evaluados.
Respecto del OE3, “Sintetizar nuevos compuestos feromonales a partir de P. chilensis”, se concluye que en esta especie existe una feromona del tipo sexual emitida por la hembra virgen que atrae solo machos, algo infrecuente en este grupo de cerambícidos. Las conductas de atracción sexual se producen principalmente hacia hembras de hasta 9 días de edad, durante la noche y madrugada (22:30 a 4:00, aprox.), con temperaturas > 14°C, velocidad del viento entre 0-1 m/s y luminosidad entre 0-4 lux. La secuencia de “llamado” de la hembra se caracteriza por la proyección del ovopositor el cual frota (se asume como “marcaje”) en la superficie del tronco mientras se desplaza sobre él, realizando esta acción repetidas veces. El macho por su parte, se aproxima volando al árbol marcado por la hembra y sigue su rastro hasta intentar montarla, con un patrón similar al descrito para otras especies de la misma familia. En consecuencia, las aireaciones y captura de volátiles posteriores con hembras se hicieron principalmente sobre individuos de menos de una semana de vida, emulando las condiciones ambientales previamente mencionadas. Los extractos obtenidos por head space dynamic (HSD) se sometieron a electroantenografía (EAG) y cromatografía gaseosa acoplada a espectrometría de masas (GC-MS) desde los cuales aún no se han detectado compuestos de interés, pero esta etapa está en desarrollo, y continuará durante la temporada 2023-2024 con el compromiso del equipo investigador y del Dr. Andrés Quiroz (UFRO, quien nos ha apoyado desde 2022), para intentar identificarlos.
Respecto del OE4, “Identificar patógenos (fito- y ento) en madera de árboles infestados”, no hubo detecciones de síntomas o signos de micro- o macroorganismos asociados al daño e infestación de P. chilensis.
Respecto del OE5, “Desarrollar un programa de manejo sostenible de P. chilensis mediante técnicas de control con semioquímicos y silvícolas en la Región de La Araucanía”, en lo relativo al manejo con semioquímicos, una vez lograda la identificación y disponibilización de los componentes feromonales, se podrá desarrollar tecnologías de manejo basadas en feromonas, tanto para monitoreo como para control (confusión sexual, trampeo masivo), pero los acotados períodos de disponibilidad de adultos de este insecto (< 6 semanas/año), los plazos del FIBN para este iniciativa (3 años), y la condición secuencial de los estudios, en varios de los cuales se debe terminar uno para poder iniciar el siguiente, han demorado este objetivo, aunque se ha perseverado en ello por parte del equipo investigador y se espera llegar a la identificación de los compuestos durante la temporada 2023-2024. A partir del análisis de los factores de predisposición es factible recomendar ciertas prácticas silvícolas para reducir el nivel de infestación de P. chilensis, en situaciones de alta presión del agente, tales como: realizar plantaciones a mayores altitudes (m.s.n.m.), mantener altas densidades de plantación y del sotobosque, reducir los refugios para adultos y los sitios de ovipostura, eliminando la capa de epífitas que se desarrollan sobre la corteza de las primeras trozas de los troncos, como prácticas principales. La infestación por P. chilensis, se presenta desde muy temprano en el desarrollo de los robles, iniciando en árboles de DAP de 10 cm en promedio, siendo estos los más susceptibles dada la proporción de la madera afectada en relación al tamaño del fuste y, por ende, los manejos preventivos deben comenzar temprano en el ciclo de los rodales.