Resumen de los resultados obtenidos

Describa en forma precisa y breve el tópico general del proyecto, sus metas y objetivos y los resultados alcanzados, enfatizando como el proyecto es de utilidad para la aplicación de la Ley Sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal. Utilice un lenguaje apropiado para la comprensión del público no especialista en el tema. Esta información será publicada en la página web del Fondo de Investigación del Bosque Nativo
En general hay similitudes entre los tres socio-ecosistemas estudiados (Colliguay, Tantehue y Panamá), aunque con algunas diferencias particulares en cada caso.
No obstante, los procesos históricos de producción responden a los mismos patrones de ocupación, la cual consiste en una antigua tradición agrícola basada en el cultivo de trigo, extracción de leña y procesamiento a carbón y ganado. La degradación ecosistémica también es trasversal siendo la alteración del ciclo hídrico el mayor síntoma relevado por los habitantes de los 3 sectores, llegando en uno de los casos estudiados, a una situación de emergencia sanitaria para la población local.

La falta de agua, sumada a la erosión de los suelos y cambios en los patrones de consumo de las ciudades volvió inviable, a gran escala, estas actividades tradicionales, las que, en el caso de Tantehue y Panamá aún se mantienen en forma marginal y en Colliguay desaparecieron casi por completo.

El cambio en la intensidad productiva ha posibilitado la recuperación de diversos sectores del MBE. En el caso de Colliguay la conversión hacia la apicultura y otras actividades de bajo impacto han posibilitado aún mayor la recuperación del MBE.

El porcentaje de especies exótica se mantuvo en los 3 predios en un rango semejante.

En los 3 sectores la fiscalización y el cuidado del MBE resultan deficientes por lo que los procesos de recuperación de estos ecosistemas se vuelven muy difícil. Agréguese que la opinión de los expertos sobre las tendencias de los procesos de degradación ambiental indica que el impacto negativo sobre estos ecosistemas se agudizará. Factores como la disponibilidad de agua, la fertilidad del suelo y la diversidad biológica tenderán a disminuir y los efectos del cambio climático tenderán a aumentar.

Por otro lado, el traspaso generacional y el nivel socioeconómico resultaron ser variables limitantes. En todos los casos hay un bajo traspaso generacional. Muchos de los jóvenes han migrado a las ciudades en busca de mejores oportunidades educacionales y laborales. La migración campo-ciudad es un fenómeno que, a juicio de los expertos, va a aumentar o, al menos mantendrá los niveles actuales. No obstante, se espera un movimiento inverso ciudad-campo hacia parcelas de agrado (fenómeno que ya se ve en el sector de Tantehue).

El nivel socioeconómico varía según las particularidades de cada uno de los núcleos familiares entrevistados, sin embargo, en general existe una tendencia a encontrar bajos niveles de ingreso, los que, en gran parte, no provienen de las actividades productivas vinculadas al MBE. Los niveles de pobreza, a juicio de los expertos, se mantendrán igual o disminuirán levemente, aunque se advierte la necesidad de reformular el concepto de pobreza como un umbral de ingreso en el mundo rural.

El nivel educativo tiende a aumentar, sistemáticamente, con mayores niveles educativos en las nuevas generacionales con relación a sus precedentes. Esto, debería redundar en mejoras de los procesos productivos y aumento en la captación de fondos públicos, aunque no necesariamente contribuya a la conservación del medio ambiente.

En general los tejidos sociales están desarticulados y muy reticentes a la organización, a pesar de las ventajas económicas que la asociatividad les podría brindar. Un bajo de nivel de organizaciones activas caracteriza la 3 realidades estudiadas. Esta debilidad del tejido social facilita el arribo de nuevos actores, muchas veces grandes industrias que ven en el campo envejecido (edad promedio de 51, 70 y 62 años para las localidades de Colliguay, Tantehue y Panamá, respectivamente) y paulatinamente despoblado, un territorio con bajo costos de oportunidad que les puede resultar beneficioso.

Mineras en Colliguay, Agroindustrias e Inmobiliarias en Tantehue y Forestales en Panamá, protagonizan un escenario de presión social en contra de la continuidad de las actividades tradicionales de cada localidad (Hilandería, trenzado de paja Teatina, etc.).

La perspectiva sólo ecológica invisibiliza las comunidades humanas que se desarrollan en los ecosistemas pudiendo generar profundos conflictos sociales. Los humanos como parte de los ecosistemas deben poder satisfacer sus necesidades, tanto de subsistencia como de socialización, a partir de los recursos ecosistémicos que habitan.

Y la perspectiva sólo socio-productiva puede implicar degradación ecosistémica por sobre los umbrales de reposición o incapacidad de sustentación económica de la comunidad en un contexto determinado por inadecuación cultural.

En definitiva se requiere del análisis integral constante que posibilite evaluar la sustentabilidad de los socio-ecosistemas el menos a una escala predial.

La modelación por multi-objetivos, mediante la maximización de los ingresos controlando los efectos de erosión (pérdida de suelo) y restringiendo la cosecha de productos a un rendimiento no decreciente, ha resultado ser una muy útil herramienta para la proyección de escenarios de tratamientos silviculturales. No obstante, el ajuste del modelo y su posterior validación en contraste con datos obtenidos desde casos en los cuales se implemente un uso combinado, requiere de una instancia intermedia de corrección de aquellos factores incorporados al modelo, y que aunque en lo matemático no denotan infactibilidad, contienen mucha variación asociada a factores externos, ajenos al modelo.

Los resultados del modelo muestran que el uso combinado, al margen de ser un método viable a realizar en ecosistemas de matorral y bosque esclerófilo, no siempre es el más apropiado. En el predio de Panamá, el modelo demostró que el esquema silvicultural debe desarrollarse sólo en función de la extracción de hojas de boldo, contrario a lo encontrado en los dos predios restantes.

El indicador de rentabilidad utilizado en el modelo, es un parámetro prácticamente universal. Por lo tanto, se sugiere la utilización de indicadores más específicos a la situación teórica particular. Se recomienda al Valor Esperado del Suelo, el cual atribuye una valoración a la unidad de superficie, bajo el supuesto de rotaciones infinitas de producción.

No obstante, el modelo de uso combinado ha resultado de utilidad para proyectar escenarios futuros de producción, evaluando diferentes prácticas silviculturales, relacionadas en primer orden a la obtención de PFNM, en complemento con prácticas convencionales presentes en la actualidad como es la cosecha de leña de Espino.

El estudio de Indicadores realizado a partir de las consultas de expertos, es una etapa que aun está inconclusa. Si bien se ha logrado formalizar la estructuración de cada uno de ellos, así como organizarlos en torno de la importancia relativa a las prácticas específicas de cosecha de hojas de boldo y biomasa de quillay, aún tienen que ser validados por los actores locales, en cuanto a su nivel de aplicabilidad, dado por el entendimiento que tengan de ellos y comprensión de su funcionamiento y objetivos.

Recomendaciones

Los resultados de este estudio son de corte teórico y por ende pueden distar mucho de las situaciones reales relacionadas con los socio-ecosistemas del MBE. No obstante, la extensa metodología desarrollada, incluyendo análisis cualitativo y cuantitativo de los casos particulares ha permitido enriquecer la fundamentación de los antecedentes necesarios para la formulación del modelo de uso combinado, la elaboración del protocolo de uso combinado y los Indicadores ambientales propuestos.

Un aspecto redundante en cada una de las etapas de desarrollo del estudio se relaciona con la necesidad de contar con investigación especializada referente a los objetivos de manejo de cada producto obtenido del MBE. Es decir, hay mucho desconocimiento de la biología y ecología de las especies y sus interacciones, información que se vuelve fundamental en la gestión de ecosistemas que se encuentran tan degradados como el de objeto de estudio.

Por último, se valoran aquellas instancias en las que se promueve el fortalecimiento del tejido social rural, el traspaso generacional, la asociatividad de los pequeños y medianos productores del MBE, todo para que logren valorizar de mejor manera la concepción de sus recursos. Es así como la asociatividad debería posibilitar la diversificación productiva, aumentar los volúmenes de producción y aumentar la captación de fondos, tanto públicos como privados, generando mayores ingresos. En aras de lograr mayor rentabilidad productiva se podrían fomentar redes de comercio justo y facilitar el acceso a procesos de certificaciones de origen y ambientales, que sean más accesibles al pequeño y mediano productor, e incorporar todos estos factores en la planificación y gestión del manejo predial derivando en una mejora de los métodos de aprovechamientos de los recursos.